El galeón Nuestra Señora de Atocha fue construido para la corona de España en los astilleros de La Habana en 1620. Desplazaba 530 Tm, tenía 56 codos de ribera de eslora, 17 codos de ribera de Manga (náutica) y 9,5 codos de ribera de calado (El codo es una medida que se utilizará durante siglos por diferentes culturas y en todas con diferente longitud, (el codo de ribera se utilizaría en Castilla también conocido como codo real que equivalía a 33 dedos o 0.574m). Llevaba palos trinquetes y mayores con velas cuadras y un palo de mesana con vela latina. El Atocha tendría el castillo de proa alto, combés bajo y castillo de popa alto de un galeón típico de comienzos del siglo XVII. Formaba parte como nave capitana o retaguardia de la Flota de Indias.
En 1622 un huracán lo hunde frente a las costas de Florida, trasladaba en sus bodegas un importante cargamento con 24 toneladas de plata en 1,038 lingotes, 180.000 pesos en monedas de plata, 582 lingotes de cobre, 125 barras y discos de oro, 350 cofres de índigo, 525 fardos de tabaco, , 1,200 libras de platería trabajada, un exquisito lote de cajas de marfil labradas de Ceilán y 20 cañones de bronce.
En 1969, Mel Fisher y su tripulación de Treasure Salvors iniciaron la asidua búsqueda del tesoro del Atocha, la cual duró 16 años. En 1975, su hijo Dirk encontró cinco cañones de bronce cuyas marcas concluyeron la identificación del Atocha. Posteriormente encontrarán el resto del tesoro valorado en 500 millones de dólares de aquel momento.
Será uno de estos cañones donado por Mel Fisher en 1976 a los reyes de España en su primer viaje a Estados Unidos, estos lo mandan al Archivo de Indias donde ha permanecido en su entrada principal desde entonces.
Entre el 5 y el 12 de octubre, con motivo de la Semana Europea de la Conservación y Restauración, se muestra al público los trabajos de reparación y preservación de esta pieza.
Este cañón formará parte de la exposición La Flota de Nueva España y la búsqueda del galeón Nuestra Señora del Juncal, que se inaugurará a finales de noviembre en la planta alta del edificio.
Será necesario la elevación de esta pieza de la planta baja a la primera en la que se llevará a cabo tanto la restauración como la posterior exposición del mismo.
Una grúa extraerá por una de las puertas del archivo el cañón y lo trasladar hasta una ventana de la primera planta, en esta instalaremos una torre móvil de andamio con un cabestrante que lo elevará y lo situará en su interior en la altura adecuada para su restauración.
El problema lo encontramos en que la grúa lo dejará sobre un escalón dispuesto en el hueco de la ventana con una profundidad de 1.50m, deberemos arrastrar con la torre esta pieza de 1200kg hasta la vertical que se sitúa en el centro del andamio.
Vamos a crear un sistema doble de plataformas de madera entre las que se disponen tubos de andamios, esto nos permitirá arrastrar el cañón fácilmente hasta disponerlo en la vertical teniendo que realizar un recorrido de 2,5m. Una vez situado en dicha vertical procederemos a elevarlo a la altura de trabajo donde se disponen plataformas en las que se colocan durmientes de madera adaptados a la forma cilíndrica de la pieza.
Desde aquí se traslada a una zona adjunta donde se llevará a cabo el trabajo de restauración a vista del público.
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