EL PROYECTO DE RESTAURACIÓN
Este proyecto comenzó hace 15 años, en 1999 cuando el prior del monasterio alerta de los desprendimientos que sufre el monolito, un año más tarde, los trozos desprendidos del recubrimiento llegan a hacer agujeros en el suelo quedando al aire la estructura de hierro en la zona superior. Se acordona el conjunto y se encarga al arquitecto Pedro Rodríguez un informe para evaluar el estado del conjunto histórico. El 20 de septiembre de 2002 se firma el compromiso de restauración, con un coste inicial de 185.610 €. En octubre de 2003 se comienzan los trabajos siendo adjudicataria la empresa Joaquín Pérez Díez, S.A, se monta un andamio especial, siendo necesario bloques de hormigón a modo de lastre donde se fijarían los cables (tensores) que servirán de amarres, sin transmitir el empuje que ejerce el viento sobre el andamio, a la columna. Se comprueba el estado lamentable en que se encuentra el monumento, el hierro de la estructura sufre una corrosión muy fuerte con una alta oxidación que provoca el estallido de la piedra y grietas de distinta consideración llegando algunas a atravesar la columna desde el fuste a la parte superior, acentuándose los problemas en el ábaco sobre el capitel, que presenta una corrosión irreversible en la armadura del hormigón. Los trabajos comienzan en el verano de 2004., y en octubre de 2006 se da a conocer el informe definitivo de su estado, siendo este peor de lo que se pensaba. La columna con una base cuadrada de 9.70m y una altura de 47.90m está completamente desgranada, se han roto las piedras que la recubren por el empuje del oxido de los elementos metálicos que componen su estructura interna. Será necesario desmontar la columna hasta la base para crear un nuevo armazón. Las obras no comienzan hasta 2008, año en que la Junta de Andalucía declara el monolito como bien de interés cultural y se libra un presupuesto para su restauración con cargo a al Ministerio de Fomento y a la Diputación de Huelva. Se realiza un nuevo proyecto del arquitecto Pedro Rodríguez Pérez, que recupera varios de los elementos perdidos en las anteriores intervenciones como son el orbe, la corona y el pedestal de planta hexagonal, también se dota a la columna con una escalera interior de caracol que permite acceder hasta su punto más alto.UN POCO DE HISTORIA
Su construcción finaliza en 1892 coincidiendo con la conmemoración del IV Centenario del descubrimiento de América. Son el arquitecto Velázquez Bosco y el escultor Rafael Mélida los responsables del proyecto.EVOLUCIÓN EN SUS DIVERSAS INTERVENCIONES.
En sus ciento veinte años de existencias, el monolito ha sufrido múltiples modificaciones durante las intervenciones a las que se ha visto sometido.